Crónica de una Conferencia Frustrada o Cómo No Tropezar Dos Veces con la Misma Piedra

¿Qué ocurre cuando nuestras expectativas no se cumplen?

Este martes cogí mi portátil, mis notas y me dirigí al Centra Cultural Can Fabra dispuesta a dar la Conferencia-Seminario que estaba planificada desde hace 3 meses.

Cuatro horas antes mi portátil (mi compañero de trabajo indispensable), había dejado de funcionar de repente, no sé si fue un aviso de lo que iba a pasar más tarde o pura casualidad, seguramente lo segundo. Por suerte, volvió a funcionar y no volvió a fallar.

Si he de ser sincera tenía un pensamiento que me iba rondando por la cabeza desde hacía rato y era que probablemente no iba a venir nadie o si acaso, 2 o 3 personas.

Cuando llegué a la Biblioteca, 45′ antes para poder prepararlo todo, pregunté por el Sr. Josep que era la persona encargada de proporcionarme todos los medios audiovisuales necesarios para la Conferencia en el Auditorio.

Muy amablemente me acompañó y empezamos a hacer las pruebas correspondientes, de sonido, del proyector, luz, etc.  Una vez estuvo todo listo me dispuse a acabar de revisar los últimos detalles mientras esperaba a los asistentes.

Aproveché para hacer una foto y compartir en Facebook y también para atender a personas que se acercaban a la puerta y que se quedaban allí preguntando si era la Sala de la Gent Gran, si era donde se iba a hacer una presentación de un libro o qué era lo que se iba a hacer.

Se acercaba la hora y no aparecía nadie, excepto de nuevo la Sra. (después supe que se llamaba Tere) que me había preguntado por la presentación del libro. Venía con el catálogo de las actividades programadas y allí estaba mi presentación del libro, perdón, mi Conferencia: Eustrés, Distrés. Les Dues Cares de la Mateixa Moneda». Resulta que estaba en el apartado de Presentaciones de Libros y Conferencias y sólo ponía el título  y mi nombre y no había ningún otro tipo de información.

Así que una vez subsanado el malentendido, Tere me dijo que no le importaba, que se quedaba porque le parecía interesante el tema. Un buen ejemplo de adaptación ante los imprevistos y en lugar de sentirse decepcionada y convertirlo en un problema, ver una oportunidad. Así que desde mi punto de vista, una buena aplicación práctica de uno de los puntos que iba a tratar en la Conferencia.

Y se cumplió la profecía, no vino nadie más. En ese rato de espera tuve la oportunidad de mantener una charla con Tere (vecina del barrio de toda la vida) que fue todo una fuente de informacué tipo de actividades se hacen, etc. etc.

Llegado este momento y después de despedirme de Tere, el pensamiento que me vino a la cabeza fue otra vez lo mismo y la frase esa, tan manida, de a la tercera será la vencida.

¿He hecho todo lo que podía hacer?

Tal vez, esto que te estoy contando trasladado a otra situación y lugar te haya ocurrido a ti. La sensación de que no has hecho todo lo que podrías haber hecho. De deseos encontrados, por un lado quiero conseguirlo (una nueva entrevista de trabajo, un puesto de mayor responsabilidad, que acepten el proyecto que he propuesto, conseguir…) pero por otro lado hay un deseo, muy en el fondo,  de no pasar por ese momento de intranquilidad, incertidumbre, nerviosismo.

¿Paso a la acción o espero a que las cosas sucedan?

Y si reviso qué es lo que ha pasado o qué es lo que no ha pasado y me pregunto ¿qué ha ocurrido para que no hubiera asistentes?, se me ocurren unas cuantas cosas que podría haber hecho  y no hice o lo hice en el último momento.

Realmente no importa cuántas cosas más podría haber hecho, sino el darme cuenta de que he esperado que las cosas sucedan por lo que puedan hacer  los demás en lugar de hacer todo lo que está a mi alcance para que sucedan.

Y así no esperaré a que a la tercera sea la vencida, sino que la reflexión me lleva a proponerme un desafío y  es: a la tercera pondré  todos los medios y recursos a mi alcance sin reparar en esfuerzos para que llegue al máximo nº de personas  y poder convertirlo en una realidad y que no se vuelva a quedar en una Conferencia Frustrada.

Y  este aprendizaje también me sirve, no por ser nuevo porque no lo es,  para descubrir y ser consciente de cuál es esa piedra con la que de vez en cuando vuelvo a tropezar para poder estar más atenta en la próxima ocasión y que se convierta en una Conferencia, Proyecto, Entrevista o lo que fuere, exitoso.

En mi Ebook que te puedes descargar Gratuitamente suscribiéndote aquí mismo, encontrarás  algunas pautas que  te pueden servir para reducir tu estrés y ansiedad que era el tema de la Conferencia.

Si quieres puedes dejar tu opinión o comentario sobre el tema.

¿Te ha pasado alguna vez? ¿Cual es tu piedra?